Dice la canción

Matemática de la Carne de Rayden

album

En Alma y Hueso

28 de octubre de 2014

Significado de Matemática de la Carne

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"Matemática de la Carne" es una de las canciones más emblemáticas del rapero español Rayden, incluida en su álbum "En Alma y Hueso", lanzado en 2014. La canción mezcla elementos del hip hop con una liricidad poética que se aleja del enfoque tradicional del género, explorando las complejidades del amor y el deseo desde un prisma personal e íntimo.

La letra de "Matemática de la Carne" nos presenta una visión sensual y envolvente sobre el acto de amar. El uso de metáforas astronómicas como “me sentí astronauta” y referencias a los fenómenos naturales crea un ambiente casi etéreo que eleva el amor físico a algo cósmico. Este enfoque no solo ilustra la pasión entre los amantes, sino que también establece un contraste con la cotidianidad de lo que significa estar enamorado: “Borrando en el felpudo el camino de migas / Para que nadie siga el rumbo”. Aquí, Rayden insinúa un deseo por preservar la intimidad de esa conexión, protegiéndola del mundo exterior.

A lo largo de la canción, hay una presencia constante del humor y el sarcasmo. “Perdí el sentido del amor pero no del sarcasmo”, dice Rayden, dejando claro que aunque se adentra en territorio sentimental, no pierde su capacidad para ver lo ridículo o absurdo en algunas situaciones. Esta dualidad —el deseo ardiente empañado por un ingenio lúdico— permite al oyente conectar profundamente con el mensaje sin caer en melodramas innecesarios. También juega con la idea de comunicación no verbal: "Leyendo el braile cada surco de piel", sugiriendo que las palabras pueden resultar insuficientes frente a la intensidad física y emocional.

El tono fresco e irreverente continúa cuando habla sobre los cuerpos como mapas donde nuestras cicatrices son parte de la historia compartida: “Cicatrices que aún recuerdo en sueños”. Aquí se hace evidente un sentido de nostalgia melancólica que resuena a medida que examina cómo cada relación deja huella. A esto le sigue una invitación abierta a seguir explorando juntos yumores y placeres compartidos: “Rompamos juntos la barrera del sonido / Cuando el gemido se coma al ruido”.

Esta vividura lírica presenta momentos cinematográficos, agregando capas visuales fascinantes: desde escenas idílicas hasta situaciones cotidianas transformadas en experiencias vibrantes —“Pongo cara fea para repetir hasta la toma buena”— reflejando tanto vulnerabilidad como confianza ante lo inevitable.

Rayden demuestra ser un maestro en combinar ritmos cautivadores con contenido potente, ofreciendo reflexiones profundas sobre las relaciones personales mientras invita al oyente a disfrutar morbosamente sus versos cargados de sexualidad: “Te comería a versos pero me tragaría mis palabras”. Este juego verbal reafirma su habilidad para jugar con ideas complicadas utilizando ingenio y ritmo ágil.

La recepción crítica ha sido notablemente positiva; muchos han alabado tanto su técnica lírica como su capacidad para contar historias complejas mediante rimas fluidas.

En resumen, "Matemática de la Carne" es mucho más que una simple celebración del cuerpo; es un viaje por los recovecos emocionales y físicos del amor contemporáneo. Rayden hace magia al fusionar poesía urbana con reflexiones penetrantes sobre relaciones modernas paradas entre infatuación profunda e ironías pasajeras. La canción culmina no solo en emoción pura sino también dejando preguntas abiertas sobre cómo nos comunicamos y conectamos entre nosotros dentro del vasto universo humano. En definitiva, su obra nos recuerda que incluso dentro del deseo físico existe un significado más profundo ligado a nuestras experiencias compartidas.

Interpretación del significado de la letra realizada con IA.
Fuimos a hacer el amor
Y parece que volvimos de la guerra.
Me sentí astronauta
Cuando me abriste la puerta,
Perdido en tus lunares,
Diciendo adiós a la tierra,
Borrando en el felpudo el camino de migas
Para que nadie siga el rumbo
Que entreven tus piernas cuando caminas,
Palmo a palmo formando una linea,
Una recta entre tus curvas
Y mis indirectas con puntería,
Volaron los minutos teniéndote cerca,
Ocultos, y jugando mudos juntos
A ese "truco o prenda"
Con el lenguaje de las manos,
Leyendo el braile cada surco de piel
Pero también tus labios,
Vivimos sin horarios, lejos de calendarios,
Versos de pasión y no de aniversario.
Todo lo que te dije lo hice:
Cicatrices que aun recuerdo en sueños
Cuando despertamos vecindarios.
Mi mas sentido bésame, bésame, besayuname,
Ayúdame a deshacer la cama.
Te comería a versos pero me tragaría mis palabras,
Por eso mejor dejarnos sin habla.
Perdí el sentido del amor pero no del sarcasmo
Así que te haré el humor hasta llegar al orgasmo,
Que he visto enamorados ojos de legañas.
Pero no hay mejores brindis que
Los que hacen tus pestañas.
Estas en mi lista de sueños cumplidos
Y ya en el de pecados compartidos
Rompamos juntos la barrera del sonido
Cuando el gemido se coma al ruido,
Hagamos juntos todas las maldades
La dieta de los caníbales.
Soy de los que siempre creyó en las señales,
Por eso pégame, muérdeme,
Déjame cardenales.
Y navegué en tu piel,
Un marinero sin carnet poniéndome tu desnudez de abrigo.
Perdí el hilo, bailé el tango de tu tanga
Y me pisaste con zapatos altos de tacón fino.
Te dije 'hazme lo que quieras' y me hiciste a mí,
Sin adjetivos, me pusiste a mí sentado y yo perdí el sentido.
Uní lunares como una línea de puntos,
Y así todos juntos conseguí formar 'siempre contigo'.
Querías un sastre y una sonrisa medida, cosida,
Pero para esa no hay cabida.
Con los lujos de lujuria y con lo caras que están las caricias,
Me hice tuya y de diseño trajes de saliva y ligas.
Ya pagué mi crimen, le puse fin,
Ahora tú solo dime, dame y gime,
Tómame y di que tú estarás ahí,
Que no me olvide, por ti y por mí.
Que haré que hasta te corras el carmín, pero no el rímel.

Bésame, bésame, besayuname.
Ayúdame a deshacer la cama,
Te comería a versos pero me tragaría mis palabras,
Por eso mejor dejarnos sin habla.
Perdí el sentido del amor pero no del sarcasmo,
Así que te haré el humor hasta llegar al orgasmo.

He visto arrejuntarse el hambre con las ganas,
Pero no hay mejor skyline que verte tumbada.
Cada vez que quedo con ella parece que una voz en off dice
'silencio, se rueda', y cuando llega la escena del beso,
Pongo cara fea para repetir hasta la toma buena.
La reina del exceso.
Siempre fui un experto en coger el amor por donde quema.
Que desmesura con mano dura, ganas de locura y de acercar posturas,
última noche en tu cintura.
Cuerpo a cuerpo, viaje espacial, vuelo directo,
Sin pagar tasas de aeropuerto ni aduanas.
Sin más parada en el trayecto
Que pararnos para hacer escala entre tu desnudez y tu pijama.
Sentados como dos gatos sobre tejados de cinc,
Escurriendo botellas de champán, "chinchin".
En una noche de San Juan que parecía abril,
Clímax, final feliz.

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