Dice la canción

De Repente Desperté de Melendi

album

Lagrimas Desordenadas

13 de noviembre de 2012

Significado de De Repente Desperté

collapse icon

"De repente desperté" es una poderosa balada del artista español Melendi, perteneciente a su álbum "Lágrimas desordenadas", lanzado en 2012. Esta canción se destaca por su enfoque crítico hacia la realidad social y política que vivimos, así como por la sensibilidad emocional que transmite. Melendi, conocido por su estilo personal e íntimo, captura en esta letra una reflexión profunda sobre diversos aspectos de la sociedad contemporánea.

La canción comienza con el concepto de un sueño que parece ideal: un mundo sin conflictos ni desigualdades. Estas imágenes evocas un anhelo colectivo de paz y armonía, donde no existen los problemas que atormentan a la humanidad. Sin embargo, al despertar, el protagonista se enfrenta a una dura realidad. La transición entre el sueño y la vigilia representa no solo un cambio físico, sino también un golpe emocional; cuando uno abre los ojos a la verdad, lo hace con tristeza y desilusión.

A lo largo de la letra, Melendi emplea una serie de metáforas para manifestar las injusticias sociales y económicas actuales. La figura del político "de plastilina" resalta cómo muchos líderes parecen ser flexibles a sus intereses personales, careciendo de autenticidad y responsabilidad hacia el pueblo. Este fragmento particularmente irónico ilustra la desconexión entre quienes toman decisiones y quienes viven los efectos de esas decisiones en su vida cotidiana.

Uno de los momentos más impactantes es cuando el narrador observa noticias sobre actos violentos que parecen sacar a relucir la peor naturaleza humana. Desde niños sufriendo hasta adultos atrapados en sistemas políticos opresivos, Melendi refleja una angustiosa conexión entre el dolor individual y las estructuras que perpetúan ese sufrimiento. Las imágenes de los "individuos peleando por el poder" contrastan con “un pueblo esclavizado” buscando comida en la basura; esta dicotomía subraya la insensibilidad del poder ante las necesidades básicas del ser humano.

El uso repetido de "de repente desperté" actúa como un recurso dramático a lo largo de toda la canción para enfatizar este choque brutal entre ilusión y realidad. En este sentido, cada estrofa revela otra faceta desgarradora del mundo actual mientras se exacerba esa sensación de impotencia ante situaciones donde pocos tienen control sobre sus destinos. El ritmo casi sombrío refuerza estos sentimientos melancólicos al hacer eco del desasosiego presente en cada línea.

Al final, llega una reflexión crucial: qué es realmente el sueño? Qué es igual a la realidad? El desafío aquí radica no solo en aceptar nuestra condición actual sino también en reconocer cómo muchas veces elegimos ignorar verdades incómodas frente a nosotros; esta densidad emocional puede ser difícil de manejar, pero Black minimiza esa lucha entregando consuelo al afirmar: "aunque esta humilde balada nunca sirva para nada, yo hoy dormiré más tranquilo". Esta última línea sirve como recordatorio tanto para él como para todos aquellos oyentes que buscan refugio mediante el arte.

Dentro del contexto musical contemporáneo español y más allá, "De repente desperté" ha sido bien recibida tanto por críticos como por fans debido a su contenido reflexivo y su carga emocional intensa. Melendi ha construido una carrera firme jugando con esas dualidades emocionales tan presentes en sus letras; aquí particularmente se evidencia su capacidad para transformar experiencias dolorosas en composiciones artísticas profundas.

En conclusión, "De repente desperté" se nos presenta como una balada significativa que invita a reflexionar sobre nuestras realidades compartidas mientras nos recuerda que despertar puede ser tanto liberador como condenatorio. Ciertamente marca un testimonio artístico sobre las luchas cotidianas desde una voz auténtica y comprometida con todas esas verdades tan difíciles de enfrentar.

Interpretación del significado de la letra realizada con IA.

Hoy he soñado que todo es mentira,
que no existen ni la guerra ni la paz,
ni los enfermos ni las medicinas,
que no existen las banderas,
ni palomas mensajeras.

Hoy he soñado que todo es mentira,
que no existen los parados por derecho
y que el político es de plastilina,
y que no existe un desastre
que no arregle cualquier sastre.

Y de repente desperté,
y cuál fue mi sorpresa
cuando en el telediario de la 3
un hombre mataba a sus hijos a palos
para vengarse así de su ex-mujer.

De repente desperté
y como si de un suelo se tratara,
vi que el mundo era un papel,
donde el poderoso pinta garabatos
para lavarse las manos después.

De repente desperté
y como siempre este maldito mundo,
tan extraño como absurdo,
tan cruel como taciturno,
comenzó a andar del revés.

Hoy he soñado que todo es mentira,
que en el mundo no existía desigualdad
y que los niños no mueren de sida,
y que no existen primeros,
ni últimos por extranjeros.

Y de repente desperté
y vi a cuatro individuos en la tele
peleando por el poder
mientras en la calle un pueblo esclavizado
buscaba en la basura pa' comer.

De repente desperté
y vi como detrás de un movimiento
siempre había su por qué,
que en nombre de la paz vi matar dictadores
que estaban más que puestos por usted.

De repente desperté
y como siempre este maldito mundo,
tan extraño como absurdo,
tan cruel como taciturno,
comenzó a andar del revés.

Y ahora no sé cuál es el sueño,
y cuál la realidad...
Pensamos que vamos sin dueño
que falta de verdad,
que falta de verdad...

Y no hay peor que el que no quiere ver
por muy duro que sea mirar,
me resulta tan difícil
creer que existe el destino,
cuando todo el mundo baila
si cuatro tiran de un hilo,
y aunque esta humilde balada
nunca sirva para nada,
yo hoy dormiré más tranquilo.

0

0